1. Técnica de alineación coital
Cómo hacerla: Comienza en la posición del misionero, contigo boca arriba y tu chico sobre ti, entre tus piernas. Dile que mueva su cuerpo hacia tu cabeza para que su pelvis quede ligeramente más arriba que en el misionero tradicional. En lugar de ir dentro y fuera, deberá enfocarse en oprimir tu pelvis.
¿Por qué funciona?: A pesar de tener un nombre que suena técnico, esta es una gran posición para muchas mujeres. Cambiar la alineación de tu pelvis permite que su hueso púbico frote tu clítoris lo cual puede ofrecerte una estimulación directa que la mayoría de las mujeres necesitan para alcanzar el orgasmo. Es muy bueno para las mujeres que son tímidas al momento de probar posiciones excéntricas, ya que es extremadamente fácil de maniobrar partiendo del misionero tradicional. Es íntimo y de bajo esfuerzo al mismo tiempo.
Variaciones: Para tener un contacto más intenso, usa tu mano para separar tus labios vaginales y permitir que su cuerpo frote directamente contra tu clítoris. O coloca una almohada debajo de tu cadera para crear un ángulo más accesible.
2. Ella arriba
Cómo hacerla: Él debe estar boca arriba. Ponte encima de él con una pierna a cada lado de su torso. Enfócate en mecer tu cuerpo de adelante hacia atrás en vez de tratar de ir arriba y abajo. También puedes intentar mover tu cadera en pequeños círculos o en un movimiento en forma de ocho.
¿Por qué funciona?: Estar arriba es la posición más popular para muchas mujeres, ya que te da un control total sobre el ritmo, el ángulo, la profundidad y nivel de estimulación. Hay muchas variaciones divertidas de esta posición, por lo que es muy versátil. No es una de las posiciones más intensas para el hombre, por lo que tu pareja puede ser capaz de durar mucho más tiempo de lo habitual, dándole más tiempo de llegar a su punto máximo.
Variaciones: Date la vuelta para que quedes frente a sus pies. Ofrece una vista diferente para él. Trata de inclinar tu espalda ligeramente hacia atrás con lo cual aumentará la estimulación a tu punto G. También puedes cómodamente alcanzar tu clítoris para estimularlo con la mano (esto es importante, ya que muchas mujeres no logran llegar al orgasmo sólo con la penetración).
3. Perrito
Cómo hacerla: Colócate boca abajo y apóyate sobre tus cuatro extremidades con las piernas ligeramente separadas. Él deberá estar arrodillado detrás de ti. De esta manera tendrás una profunda estimulación al punto G que puede provocarte un intenso orgasmo.
Variaciones: También puedes utilizar tu mano si requieres la estimulación del clítoris para llegar al orgasmo.
4. A caballo
Cómo hacerla: Se trata de una posición un poco complicada para entrar, pero el esfuerzo vale la pena. Quizá quieras practicarla cuando estén vestidos para saber cómo deben colocarse antes de hacerlo desnudos. Él debe estar acostado boca arriba con las piernas estiradas, tú ponte encima de él con una de tus piernas entre sus piernas y la otra en su costado. Lentamente, baja hacia tus rodillas y utiliza tu mano para guiarlo dentro de ti. Básicamente, vas a mecerte de atrás hacia adelante, frotándote contra su muslo y área púbica.
¿Por qué funciona?: Esta posición permite un fantástico roce de los cuerpos. Tú puedes controlar el ritmo, y puedes decidir exactamente cuánta presión haces en tu clítoris.
Variaciones: También puedes intentar recostándote o inclinarte hacia atrás o hacia adelante dependiendo de dónde quieras más presión, ya sea en el punto G o en el clítoris.
5. El Puente
Cómo hacerla: Comienzas acostada boca arriba como si fuera la posición del misionero. Luego debes levantar tu cadera para separarla considerablemente de la cama teniendo los pies apoyados firmemente. Él deberá estar sentado sobre sus tobillos con las rodillas separadas y puede tomarte con sus manos de la cadera para apoyarse al momento de entrar.
Por qué funciona: Esta posición te da una gran estimulación y una sensación de plenitud, ya que por el ángulo, frota directamente el punto G y tu clítoris está disponible para que él lo acaricie o incluso puedes hacerlo tú misma.
Variaciones: Él puede cambiar el ángulo de su posición hacia arriba o hacia abajo y tú también puedes participar en el vaivén moviendo tus caderas arriba o abajo. Para elevar la intensidad de esta posición, puedes decirle a tu pareja que se apoye en sus rodillas, te sostenga de la cadera y tu lo abraces con las piernas, o puedes apoyar tus piernas en su torso de manera que tus tobillos queden sobre sus hombros.
¡Diviértete!