Delia Fischer, portavoz de la FIFA, explicó que las sanciones después de un partido sólo se aplican en casos de “graves infracciones que hayan escapado a los árbitros del encuentro”.
Arjen Robben no sufrirá ninguna sanción tras admitir que se tiró tratando de conseguir un penal en el partido de octavos de final contra México en la Copa del Mundo.
Robben, que provocó el penal que permitió a Holanda marcar el gol de la victoria, admitió después del partido que se había tirado en una jugada anterior buscando conseguir una máxima pena.
La Federación Holandesa de Fútbol (KNVB) afirmó este lunes que los comentarios de Robben tras el encuentro habían sido malinterpretados. “Los medios han interpretado muy mal las declaraciones de Robben en una entrevista posterior al partido”, dijo.
La selección de Louis van Gaal se impuso 2-1 a México y se enfrentará a Costa Rica en los cuartos de final.
Con información de Agencias