Puede ser bastante confuso el proceso para bajar de peso. Lo que te funciona un mes al parecer te deja de funcionar al siguiente.

Existen muchos factores que influyen en la pérdida de peso, incluyendo el sueño, ejercicio, genes, composición del cuerpo, edad, género, dieta, hidratación, estrés, mentalidad y varias otras cosas.

Pero sólo porque es complejo, no significa que tiene que ser difícil. El truco es simplificar la manera que es la pérdida de peso.

Aquí hay unos consejos que te ayudarán a no sufrir tanto durante este proceso para llegar a tu peso ideal:

Enfócate en sentirte lleno

Sentirse con hambre o la comida prohibida puede ser un verdadero reto para aquellos que se ponen a dieta. Pero no tiene y ni debe ser así.

La mejor manera de evitar esto es comiendo una variedad de proteínas (huevo, pescado, carne), frutas y verduras, grasas saludables (aceite de oliva, aguacate, nueces) y carbohidratos de calidad (papas, camote, granos enteros, frijoles, legumbres). De este modo le brindas nutrientes a tu cuerpo que necesitas para sentirte satisfecho con menos calorías.

De esta manera evitarás alimentos que disfrutarás más pero que no te brindan mucha nutrición ni saciedad a pesar de su contenido calórico (pizza, donas, comida frita, helado, etc.).

Cambia tu perspectiva sobre los carbohidratos

No es bueno evitar los carbohidratos, deberías enfocarte más en encontrar una manera de consumirlos de manera que puedas disfrutar y seguir en tu dieta. Descubrir un estilo de comer y acatarse es el mayor factor que te ayudará a alcanzar tus metas.

Si quieres reducir tu consumo de carbohidratos, elimina alimentos como granos, papas o frijoles para evitar el almidón, deja los jugos, el refresco o bebidas energéticas para disminuir tu consumo de azúcar y frutas. Pero para una dieta que no te exige que le bajes tanto a los carbohidratos, elimina sólo el azúcar y reduce tu consumo de los otros tipos de carbohidrato.

No dejes que el alcohol te perjudique

Las calorías del alcohol tienen un papel importante para manejar tu peso. Existen alrededor de 110 a 150 calorías en la mayoría de las bebidas estandarizadas. Pero las cervezas artesanales, que se han vuelto muy populares, pueden llegar a superar las 200 calorías por porción. Tómate dos  de estos en la cena y sólo con eso ya consumiste 400 calorías.

Diviértete en la cocina

Comprar la comida y cocinar puede ser de las mejores cosas que puedes hacer para tu salud. Si odias cocinar, intenta averiguar por qué.

Has estrategias para divertirte más cocinando, incorpora a tu pareja o a la familia para volverlo una actividad. Busca recetas para almuerzos sencillos, pon música, lo que sea. La clave es no abrumarte, busca algo que creas poder cocinar y empieza por eso.

Tan pronto te sientas más cómodo, intenta preparar cosas más complejas y haz esto poco a poco hasta que vayas expandiendo tus conocimientos y habilidades en la cocina hasta llegar a un nivel en el que te sientas cómodo.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.