[sws_blockquote align=”right” alignment=”alignright” cite=”” quotestyles=”style02″]¡No se puede innovar más!”
-Phil Schiller [/sws_blockquote]
La gran presentación computacional de la semana fue la Mac Pro, una computadora de escritorio cilíndrica y más poderosa de lo que Apple había construido nunca.
La Mac Pro fue la razón por la cual el ejecutivo de Apple, Phil Schiller, exclamó la ya célebre frase: “¡No se puede innovar más!”, durante la WWDC 2013.
También cuesta miles de dólares y es mucho más máquina de lo que la mayoría de la gente necesitará en su vida.
La Mac Pro está dirigida a un reducido mercado de profesionales del diseño, la fotografía, el video y la animación.
Desde que se presentó por primera vez en 2006, la línea Pro ha experimentado pocas actualizaciones, en comparación con el resto de los productos de Apple. Recientemente, la empresa se ha concentrado en sus exitosos dispositivos portátiles y móviles, lo que hizo que varios profesionales se preguntaran si los habían olvidado.
Para quienes trabajan con computadoras de escritorio, la apariencia exterior suele ser un detalle secundario y las frecuentes mejoras al interior del viejo diseño de torre de la Mac bastaban para mantenerlos satisfechos.
Otros usuarios abandonaron la línea Pro conforme la iMac y la MacBook Pro se hicieron lo suficientemente poderosas como para cubrir sus necesidades de producción de fotografía y video.
La computadora, que es 2,5 veces más rápida que el modelo actual, provocó reacciones contradictorias que le auguran un futuro incierto.
Primero lo primero: La nueva Pro es una maravilla de diseño en comparación con su predecesora. Se trata de un cilindro negro y estilizado que se parece poco a las computadoras que imaginamos tradicionalmente.
Es más pequeña y no puede expandirse y personalizarse tanto como el sistema anterior. Apple construyó una máquina tan singular que sus usuarios tendrán que “construirla hacia afuera” y agregarle accesorios externos, como discos duros y tarjetas PCI.
Para posibilitar esta expansión, la industria deberá adoptar el estándar de conexión Thunderbolt que Apple estrenó en 2012. Por ejemplo, ya no es posible insertar tarjetas de video estándar. Los usuarios de la Mac Pro tendrán que conseguir tarjetas que coincidan con la forma de fábrica de la nueva computadora o conectarlas a través de un puerto Thunderbolt 2.
“Cambiará la forma en la que se enriquecen las computadoras, o se volverá un producto marginal”, dijo Tony Welch, director de servicios creativos del estudio de producción Beyond Pix.
Welch está emocionado con el nuevo producto y planea renovar los sistemas de su estudio, pero espera que la “arriesgada” apuesta de Apple por el Thunderbolt propicie que las empresas que fabrican discos duros, tarjetas PCI y otros periféricos ofrezcan el soporte para la “nueva” tecnología de conexión.
Chris Layhe, de CLAi, un estudio de postproducción de San Francisco, está menos impresionado.
“Básicamente se trata de dos Mac Mini unidas en un cilindro (…) Es un montón de basura. Todo lo que necesitamos en el negocio del cine y el video depende de tarjetas”, dijo.
Los usuarios de la nueva Mac Pro tal vez quieran alejarse del sistema cerrado de Apple. Layhe, quien ha filmado y editado cine desde hace 28 años, tiene siete Macs en su empresa. Está en proceso de construir unahackintosh; una computadora personal hecha a la medida que usa las mismas tarjetas y circuitos que usa una Mac y que puede corrersoftware de Mac, pero cuenta con más puertos USB y tiene capacidad para tarjetas adicionales. Construir estos sistemas no oficiales puede costar tan solo 1,500 dólares.
“No queremos cambiar a PC porque gran parte del software que usamos es exclusivo para Mac. Hemos sido usuarios de Mac desde hace mucho, mucho tiempo”, dijo Layhe. Agregó que todos sus respaldos y videos almacenados son compatibles con Mac.
La Mac Pro se presentó en 2006 y es uno de los productos más costosos de Apple: la configuración más básica cuesta 2,499 dólares y la más poderosa hasta 12,000 dólares, sin incluir monitores ni accesorios.
No se ha anunciado el costo de la nueva Mac Pro. La presentación de esta semana fue solo un vistazo previo y la computadora se venderá hasta finales de 2013.
Los usuarios de la Pro son sólo una fracción de los clientes de Apple. Las Mac representaron solo el 19% de los ingresos de la empresa durante el primer trimestre de este año, mientras que la venta de iPads es el 21% y la de iPhones el 49%.
Cuando las Mac Pro eran nuevas, los creativos fueron quienes le dieron a la línea gran parte de su respetabilidad y su factor cool. Por ahora, están disfrutando de un poco de atención de parte de Apple y esperan lo mejor.
“Estamos felices de que presentaran una torre Pro”, dijo Welch. “Creo que todos temíamos que abandonarían a la comunidad profesional”.
CNN