Precursor del simbolismo y uno de los autores más representativos de la expresión francesa, el dramaturgo y ensayista belga Maurice Maeterlinck es recordado por obras como “El pájaro azul”, puesta en escena que ha sido montada en diversas partes del mundo.
Maeterlinck, quien obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1911, murió el 6 de mayo de 1949, en Francia, dejando a la posteridad frases como “cada vez que cometo un error me parece descubrir una verdad que aún no conocía”, según un sitio dedicado a recopilar frases célebres de los famosos.
Según una breve lista difundida por “frasescelebres.net”, Maeterlinck también es autor de la cita que reza: “Las abejas sólo trabajan en la oscuridad; el pensamiento sólo trabaja en el silencio; y la virtud, en el secreto.
Maurice Maeterlinck vino al mundo el 29 de agosto de 1862 en Gante, Bélgica, en el seno de una familia acomodada, que lo educó en un colegio jesuita, señala la biografía del dramaturgo, publicada en el portal en Internet de los Premios Nobel.
Luego de cursar y practicar la abogacía en su ciudad natal y de pasar una breve estancia en París, Francia, decidió abandonar esta carrera pues se convenció de que no era apto para la profesión.
Tras este viaje en el que se relacionó con Villiers de l’Isle Adam, Maeterlinck se estableció en París, en 1896, y creó su primer trabajo literario, la colección de poemas titulada “Serres chaudes”, que publicó en 1889, año en que lanzó su primera obra teatral, “La princesa Malena”, que fue elogiada por el crítico literario Octave Mirbeau.
En los siguientes años se dedicó a escribir obras de teatro, en las que la falta de acción, el fatalismo, el misticismo y la presencia constante de la muerte fueron constantes, producto de este periodo creativo es “La intrusa” (1890), “El ciego” (1890) y los dramas de amor “La Princesa Maleine” (1892).
En su siguiente periodo creativo el dramaturgo belga aborda la sombra de la muerte, ejemplo de ello es “Joyzelle” (1903), “Marie Magdeleine” (1909).
De acuerdo con la biografía de Maeterlinck disponible en el sitio electrónico “biografiasyvidas.com”, posteriormente estudió con Jan van Ruysbroeck, F. Novalis y Ralph Waldo Emerson, lo que propició una fuerte inclinación al pesimismo y a la aceptación del dolor.
En su siguiente periodo creativo, su teatro reflejó tendencias análogas, tal es el caso de “Sor Beatriz” (1900), “Monna Vanna” (1902) y, más abiertamente, “El pájaro azul” (1908).
Ganador del Premio Nobel de Literatura, Maeterlinck fue un apasionado de la metafísica y el ocultismo, que retomó en “El gran secreto” (1921), donde abordó la existencia desde un punto de vista contrario a la dogmática católica.
En 1937, ingresó en la Academia de ciencias morales y políticas como miembro extranjero y durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) se refugió en Estados Unidos, donde continuó escribiendo y publicando.
Otras de sus obras, tras el éxito mundial de su investigación sobre las abejas, fueron “La vida de los termes, comejenes u hormigas blancas” (1926) y La vida de las hormigas” (1930).
El 6 de mayo de 1949, el destacado dramaturgo Maurice Maeterlinck murió a los 86 años de edad, en Francia.
México, 5 May. (Notimex)