La proteína es un macronutriente esencial para crear y fortalecer músculo, pero si no eres muy carnívoro, quizá te parezca algo difícil consumir suficiente, especialmente cuando se trata de tu comida entre almuerzos.

Suplementos de proteína son buena opción, excepto que las opciones son tantas que pareciera que tienes que ser nutriólogo para saber qué consumir. Aquí hay unas reglas generales que puedes tomar en cuenta para ahorrarte el esfuerzo que puede ser alimentarte adecuadamente para consumir la proteína que necesitas:

Aprende a decodificar lo que dicen las etiquetas

 Cuando buscas suplementos, evita cualquier cosa que diga que puede reemplazar un almuerzo. Aunque sepas que la proteína es un ingrediente importante en cada almuerzo, sólo es una parte de un alimento completo. Es mejor hacer licuados de proteína en lugar de contar con los pre-hechos ya que les puedes meter más nutrientes a tu gusto. Si compras comida empaquetada, procura evitar que las etiquetas contengan endulzantes, colorantes o saborizantes artificiales.

Crea tu base

Los polvos de proteína son buenísimos cerca de tu entrenamiento porque le dan proteínas rápidamente digeribles a tus músculos cuando más lo necesitan. Una buena sugerencia son los polvos a base de huevo, son lo más parecido a alimento real con ingredientes naturales. La regla básica de estos polvos es procurar que contengan más gramos de proteína que cualquier otro nutriente.

Agrega un intensificador

Combinar proteína con carbohidratos que se digieren rápidamente acelera la entrega de proteína a tus músculos después del ejercicio. Prueba una cucharada de néctar de agave con una cucharada de polvo de proteína de suero y 250 ml de agua. Sumarás 25 gramos de proteína en sólo 180 calorías. Si tienes tiempo, licúalo con un plátano con una cucharada de polvo de proteína de suero de chocolate y una cucharada de mantequilla de nuez (alrededor de 290 calorías en 30 gramos de proteína).

Usa las barras

¿No tienes tiempo para la licuadora? Es bueno tener barras de proteína a la mano para los días donde no tienes un segundo de tiempo. Sin importar la marca, siempre checa la envoltura antes de comprar. Es fácil arruinarlas con azúcar, endulzantes artificiales, azúcar de alcohol y sustituto de proteína como la gelatina. Busca una barra con 100 a 200 calorías (que no más de 19 provengan de azúcar), alrededor de 5 gramos de fibra y que tenga calcio.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.