Pocos somos inmunes al deseo de agradarle a los demás, pero resulta que la popularidad puede ser más importante de lo que crees. De hecho, un estudio dice que la falta de popularidad puede dañar tu bienestar más que la obesidad.

Parecerá ridículo, pero en el estudio observaron a 38,000 participantes de todas partes del mundo, analizaron sus redes sociales y siguieron su progreso. Descubrieron que tener amigos aumentaba la supervivencia del participantes en un 50% y si eran socialmente activos tenían un incremento del 91%.

El autor del estudio cree que el rechazo social desactiva unos cuantos genes que tienen un efecto drástico sobre nuestro sistema inmunológico.

Esto data desde la época de cavernícolas donde la falta de popularidad hacía que te tuvieras que buscar otra cueva a donde vivir. Sin un grupo para protegerte, el cuerpo no veía razón para combatir virus que podrían infectar al resto del grupo.

La misma respuesta es activada en nuestro cuerpo cuando alguien te elimina de sus amigos en Facebook o si nadie le da like a tu foto en Instagram.

Hemos desarrollado estas plataformas de medios sociales para cumplir con esta necesidad prehistórica, pero ya no lo necesitamos.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.