La obesidad, las alergias, el tabique nasal desviado y la presencia de tumores como los pólipos en la nariz pueden ocasionar los molestos ronquidos.
Según el otorrinolaringólogo Miguel Mercado Rey, la mayor parte de las personas que roncan duermen con la boca abierta porque tienen alguna obstrucción en las vías nasales.
Sin embargo, los ronquidos pueden controlarse, a través de una operación quirúrgica que corrija el tabique o extraiga los pólipos.
La rinitis alérgica no tiene cura, pero puede mejorarse con un tratamiento que a su vez disminuya los ronquidos.
“Cuando ya enfocamos el diagnóstico y desde el punto de vista del paciente que ronca, aparte de la función nasal tenemos que evaluar otras causas como obesidad, cuello corto, traumatismos a nivel cervical, etc.”, anotó.
Recordó además, que muchas personas empiezan a roncar en la infancia, incluso desde el primer mes de vida.
“Los niños no son ajenos a los ronquidos y sus causas, en la mayoría, obedecen a patologías congénitas”, precisó.
Para el médico, estas patologías infantiles se relacionan con una obstrucción de la vía respiratoria alta, producida por el aumento del tamaño de los cornetes nasales.
Por ello, señaló que tras descartar que los ronquidos sean provocados por problemas nasales, se debe evaluar las consecuencias de la obesidad y determinar si esa sería la causa.