Ya dominas cómo amarrar todo estilo de corbata, ¿pero sabes cuál corbata es la que mejor complementa tu saco o tu figura? ¿Estás combinando los patrones? ¿Y las texturas?

No te preocupes, estamos aquí para ayudarte. Aquí te enseñamos los tres pasos que probablemente no has tomado en consideración cuando se trata de tus corbatas:

Debes saber qué tamaño importa

Un hombre grande o ancho normalmente se ve más grande cuando usa corbatas delgadas y los hombres delgados parecen payasos cuando usan corbatas muy anchas. ¿Así que qué es lo mejor para ti?

Mira la solapa de tu saco y luego elige el cuello de camisa adecuado y después podrás elegir el grosor de la corbata. Tu corbata debería ser igual de ancho (el máximo de ancho) que tu solapa.

Hombres más grandes pueden usar solapas más delgadas, con tal de que el traje les quede a la talla. Lo mismo aplica para hombres más delgados y solapas y corbatas más anchas.

Evita materiales que choquen

Elegir los materiales correcto se trata de combinar el estado de ánimo de la camisa y la corbata. Una corbata brillante de seda con una camisa de cambray no aplica, pero seda en bruto o la corbata de seda tejida si aplica.

Empareja corbatas de algodón o lino con camisas de algodón para días relajados, especialmente cuando hace calor. Corbatas de lana y cashmere tejidos también te mantendrán caliente y pulido en el trabajo durante épocas de frío, pero mantente con corbatas de microfibra o seda para momentos más elegante.

Elige los colores y patrones inteligentemente

Una corbata de color sólido siempre es la opción segura la mayor parte del tiempo con tal de que evites ofensas como emparejar una corbata roja con una camisa negra. De manera similar, una corbata simple y negra sin un saco podría hacer que parezcas un pasante en la oficina o un rockero británico viejo.

Para un look clásico, procura que los patrones de tu corbata adopten el color dominante de tu camisa. Por ejemplo: una corbata de tartan verde con una camisa verde. Para un look más audaz, empareja colores que se complementan, como una camisa azul con una corbata amarilla clara.

Cuando combines patrones, recuerda que mientras más fuerte el patrón en un traje o una camisa, más sutil debería ser el patrón de la corbata (y vice versa). Así que si tienes un patrón pequeño, como rayas delgadas o puntos pequeños, emparéjalo con unos patrones más grandes.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.