Ucrania marcó hoy el vigésimo séptimo aniversario de la catástrofe nuclear de Chernobyl, la peor ocurrida en el mundo, que según el saldo oficial causó 31 muertes directamente relacionadas con el desastre.

En la ciudad de Slavutich, a unos 50 kilómetros de la central destruida, decenas de personas depositaron flores y veladoras encendidas en el monumento construido en memoria de las víctimas, mientras que en Kiev, capital ucraniana, se repitió la escena.

En un discurso, el presidente Viktor Yanukovich pidió a los ucranianos recordar a todos los trabajadores de limpieza difuntos y honrar su heroísmo y reiteró que el gobierno continuará prestando la máxima atención para superar los problemas de la población afectada.

Asimismo, afirmó que fortalecerá constantemente la protección social de los trabajadores de limpieza de Chernobyl, de acuerdo con despachos de la agencia local de noticias Ukrinform.

Yanukovich, quien esta mañana visitó la planta nuclear, expresó su agradecimiento por la asistencia internacional, de Rusia, Estados Unidos, Japón y Canadá, brindada a Ucrania para hacer frente a las consecuencias del accidente de Chernobyl.

Pidió a los ucranianos, en recuerdo de la gran tragedia, unirse y consolidar los esfuerzos del gobierno y la sociedad para resolver los problemas relacionados con la ecología y la rehabilitación de las zonas contaminadas.

Dos explosiones ocurridas durante pruebas en el cuarto reactor de la central nuclear, el 26 de abril de 1986, expulsaron más de 60 toneladas de sustancias radiactivas hacia la atmósfera y la nube contaminada se extendió por Ucrania, Bielorrusia y Rusia.

La fuerza de las explosiones, entre 30 y 40 veces más que la bomba en Hiroshima en 1945, fue tan grande que el acero y plomo que revestían al reactor se fundieron, recordó la agencia Ukinform.

Según las cifras oficiales, las explosiones registradas durante la lucha contra el fuego, que duró cerca de 10 días, causaron la muerte de 31 personas e hirieron a más de 200, aunque activistas estiman que casi 15 mil perdieron la vida como consecuencia del accidente.

La organización ambientalista Greenpeace calcula al menos 100 mil muertes imputables a la contaminación radiactiva.

Alrededor de 240 mil personas participaron en la extinción de los incendios y trabajos de limpieza en aquella época y recibieron altas dosis de radiación.

Para evitar nuevos vertidos de materiales radiactivos, hasta finales de 1986, el cuarto reactor de la central nuclear fue cubierto con un sarcófago especial, construido por miles de voluntarios y soldados que más tarde fueron llamados los “limpiadores de Chernobyl”.

Los trabajos de limpieza aún continúan en la central nuclear, dijo en su visita el presidente Yanukovich y estimó que las pérdidas totales del accidente alcanzarán la cifra de 180 mil millones de dólares en el año 2015.

Moscú, 26 Abr (Notimex)