Hay periodos de nuestra vida en que las preocupaciones se instalan en nuestra mente y nos invaden pensamientos que no dejan que podamos desarrollar nuestras actividades con total tranquilidad. Esto en muchos casos, si es que no tenemos el control suficiente, termina generando un estrés que afecta no solo psicológicamente sino que también de forma física.
De la misma manera que cuidamos nuestro cuerpo debemos hacerlo con nuestro cerebro, ya que es una herramienta muy poderosa, que según los expertos tiende por defecto a lo negativo.
Según un artículo publicado en Huffington Post, existen trucos para conseguir que tu día sea más positivo y reducir el estrés junto a esa negatividad que inunda a ratos nuestros pensamientos.
Piensa en las personas que amas: Cuando te sientes agobiado por algo, lo mejor que puedes hacer es conversarlo con tu familia. Esto lo confirma un estudio de investigadores de la Universidad de California, que indica que las personas que reflexionan sobre lo que les ocurre y sobre la gente que más aprecia, tienen menores niveles de estrés.
Utiliza tu imaginación: Los ejercicios de visualización son de mucha ayuda. Los expertos indican que imaginar que estás en una playa o campo relajante ayuda a que puedas reducir tus niveles de estrés y llevarte a la calma.
Repite una afirmación positiva: Las publicaciones de la Society for Personality and Social Psychology’s Character & Context, señalan que repetir frases como “Soy capaz. Soy querido. Soy valiente”, ayudan a la salud y a reforzar pensamientos positivos.
Trátate como una persona feliz: La forma en que caminas es que indica como te sientes por dentro. Los estudios aseguran que caminar con una postura erguida cambiará tu actitud y ayudará a que te sientas un poco más feliz.
Concéntrate en la respiración: Esta puede ser una de las maneras mas simples para sentirse mejor cuando los pensamientos negativos llegan a ti. El articulo agrega que si te sientes agobiado, debes concentrarte en cómo inhalas y exhalas el aire porque esto ayuda a que te sientas más ligero.
Relaja tu cuerpo progresivamente: Finalmente los expertos explican que la relajación progresiva muscular es una técnica que supone la contracción y distensión sistemática de los músculos. Relajar voluntariamente ciertos músculos con movimientos de cuello, manos y hombros ayuda a reducir los síntomas de la ansiedad, insomnio y úlceras.