El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, aseguró hoy que la Unión Europea (UE) saldrá de la crisis más fuerte y en unidad, con defensa de sus intereses y valores para dejar un mejor continente a las nuevas generaciones.

Tras recibir el Premio Nobel de la Paz en Oslo, Noruega, el político belga afirmó que “la crisis pone a prueba” los lazos de la UE, incluso el momento mismo de decidir, y eso se convierte en un desafío real para los gobiernos y las instituciones comunitarias.

En la ceremonia encabezada por la familia real de Noruega, Van Rompuy, el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, y el presidente del Parlamento Europeo (PE), Martin Schulz, recibieron las insignias del Nobel de la Paz 2012.

“Saldremos de esta juntos y más fuertes, lo suficiente en el mundo para defender nuestros intereses y fomentar nuestros valores. Trabajaremos para dejar una Europa mejor para los hijos de hoy y de mañana; para que otros puedan mirarnos y juzgarnos”, manifestó.

Van Rompuy advirtió que lo que la crisis económica pone a prueba “es si esta unión puede perdurar”, por lo que pidió a los gobernantes responder con hechos y trabajar por el crecimiento y el empleo.

“Hay más necesidades, pero hay algo más que nos guía, y es el deseo de seguir siendo dueños de nuestro destino, un destino de unión, hablar de la idea que hemos tenido hasta ahora de Europa”, recalcó.

Durao Barroso aprovechó la ocasión para hablar de la paz, la que va más allá de las fronteras europeas, y al recordar la situación en Siria, aseguró que “es una mancha en la conciencia mundial” y que “la comunidad internacional tiene el deber moral de afrontar”.

“Nuestro compromiso es ayudar a todo el mundo a recorrer el camino hacia la paz y a justicia”, expresó el político portugués.

En su mensaje, apuntó que además de conseguir la paz, la unidad de los países europeos ha permitido consolidar las democracias, compartir valores de justicia y libertad, e impulsar muchos proyectos juntos.

“La UE es más que una unión de Estados, es un nuevo orden legal que no está basado en el equilibrio de poder entre los países, sino su consentimiento libre y voluntario de compartir soberanía”, dijo.

“Uno de los símbolos de esta Unión es el euro, la moneda de la UE. Nosotros seguimos con ella”, puntualizó al reiterar su apoyo a la irreversibilidad del euro. (Notimex)