El fotógrafo, Mauro Maione, nos transporta a los campos idílicos toscanos en su serie de paisajes. Las fotos de Maione muestran toda la belleza llamativa que las pequeñas colinas brindan.
Pequeñas chozas y árboles decoran los paisajes, pero el cielo es lo que verdaderamente llama la atención. En ocasiones, los colores no parecen reales, con sublimes púrpuras rosas y azules que ocasionalmente se combinan con una neblina etérea. Parecen paisajes de un cuento de hadas.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.