Una jirafa que se suicidó, una rebelión de osos que dejó varios animales muertos y tres investigaciones para determinar la veracidad de los hechos.
Parecería el inicio de una novela, pero se trata de algunos de los rumores que han circulado en Egipto, particularmente en las redes sociales, luego de la muerte de una jirafa en “misteriosas circunstancias”.
Todo empezó a inicios de diciembre cuando Roqa, una jirafa del zoológico de Giza, en El Cairo, se ahorcó accidentalmente tras enredarse con un cable.
Activistas de los derechos de los animales reclamaron una explicación y la aclaración de las autoridades sobre las circunstancias de su muerte fue el inicio de rumores y comentarios sarcásticos que se expandieron como pólvora en las redes sociales.
Los funcionarios del zoológico dijeron que “Roqa se había suicidado porque estaba deprimida, ya que aún estaba sola”, dijo Ahmed Omar, periodista en Cairo.
Sin embargo, activistas acusaron a las autoridades de negligencia y resaltaron el mal trato que sufren los animales en el zoológico de Giza, señaló Omar.
La “rebelión” de los osos
“”Los funcionarios del zoológico dijeron que Roqa se había suicidado porque estaba deprimida, ya que aún estaba sola”” – Ahmed Omar, periodista en Cairo
Con el “suicidio” de la jirafa, salieron a colación otras historias como la llamada “rebelión de los osos” de mayo pasado, que dejó tres osos muertos.
Pero la rebelión, como la llamaron los propios funcionarios del establecimiento, no se debió a los presuntos malos tratos a que son sometidos.
Inicialmente se dijo que había sido una pelea entre dos hembras por un macho, pero las autoridades admitieron que le habían administrado medicamentos equivocados a los animales.
Hechos como estos han generado una lluvia de críticas en contra del zoológico, que según el diario británico The Independent, tiene un pobre historial en lo que a bienestar de los animales se refiere.
Incluso, medios locales han acusado en el pasado a los empleados del zoológico de matar a camellos para comer la carne o repartirla entre familiares y amigos.
En ese contexto, muchos egipcios han manifestado su indignación en las redes sociales colocando caricaturas de jirafas en sus perfiles como señal de protesta.
La versión de las autoridades
Tres investigaciones fueron abiertas a raiz del incidente de la jirafa: una forense, una del órgano veterinario del gobierno y la otra de un comité legal independiente, según reporta el diario británico The Independent.
El gobierno designó a un antiguo director del zoológico, Nabil Sedki, que ya estaba retirado, para lidiar con la situación.
Pero Sedki considera que el problema es de los medios: “la prensa fabricó el suicidio”.
“¿Alguien cree que esta jirafa en realidad se suicidó?”, señaló.
Sin embargo, la organización internacional “Ocupa por los Animales” dijo a la prensa local que muchos mueren de heridas no tratadas, de enfermedades y hasta de hambre.
Pero además, la situación política parece haber impactado negativamente en el zoológico.
El zoológico está en las cercanías de la universidad del Cairo, escenario de frecuentes protestas entre policías y manifestantes.
Cerca de la principal entrada del zoológico está la plaza Nahda, donde acamparon los seguidores del depuesto presidente egipcio Mohammed Mursi.
Según Sedki, los gases lacrimógenos que lanza la policía contra manifestantes llega también hasta los animales.
Algunos de los animales han sido trasladados a otras áreas, pero según Sekdi hay pocas opciones, ya que el zoológico está en plena ciudad.