¿Nunca has pasado mucho tiempo preocupándote por algo para luego darte cuenta de que no valía la pena toda la energía desperdiciada? A todos nos ha pasado.

Esto pasa porque hay demasiadas cosas que nos preocupan, estresarse de cosas poco importantes puede crear muchos problemas innecesarios en tu vida, así que para ayudarte a evitar desperdiciar tu tiempo y energía, te platicamos de unas situaciones en las cuales deberías de voltear los ojos y ser indiferente y cuáles si valen tu atención.

En el trabajo

Preocupate: un colega en el trabajo te quita el mérito por tu trabajo. Te debería de importar tu reputación en el trabajo, así que junta todos los documentos necesarios y con calma explicale la situación a tu jefe.

No te preocupes: en una junta de trabajo un colega se burla de tu idea. No te preocupes por lo que él piensa y enfocate en la opinión de tu jefe. Si eres buen empleado, a tu jefe no le importará el comentario negativo de tus compañeros.

Con los amigos

Preocupate: tu amiga se burla de que te pareces a Sabrina la bruja adolescente con tu ropa. Si te molesta, no te quedes callada y explicale que te ofendió su comentario. Las buenas amistades están basadas en la honestidad y es muy probable que no quiso herirte con sus comentarios.

No te preocupes: todo tu grupo de amigos va a salir pero tú sólo escuchas el llamado de tu cama y tele. No te sientas mal por declinar la invitación, tus amigos podrían extrañarte, pero se pueden divertir igual sin ti por esta ocasión.

Con tus hijos

Preocupate: te llama la maestra de la escuela y te dice que tu hijo estaba molestando a un compañero. Esto no se trata de otros pensando mal de ti por el comportamiento de tus hijos, se trata de no criar a un bully. Así que habla con tu hijo y procura que deje de hacer lo que esté haciendo mal.

No te preocupes: crees que tus hijos necesitan ocupar todo su tiempo con actividades extracurriculares para ser aceptado en una buena universidad. Esto no es cierto, lo que tus hijos necesitan es un tiempo equilibrado de actividades, tiempo para familia y tiempo para ellos mismos, sin importar sin entrarán a la universidad o no.

En cualquier día dado

Preocupate: Si es peligroso o demasiado pesado el camino diario para ir al trabajo, esta bien que eso sea suficiente para buscar otra cosa. Busca algo más cerca o algo que te permita trabajar desde casa.

No te preocupes: si tu casa nunca se ve limpia. En lugar de lamentar tus capacidades (o falta de) de limpieza, busca a alguien más que te ayude con esas cosas, como un compañero de piso o algún familiar dispuesto. También puedes contratar a alguien te que haga la limpieza.

Comida

Preocupate: sientes que tu obsesión por comer pura comida orgánica se ha vuelto una tarea muy pesada y sólo es una tendencia. Resulta que la carne orgánica tiene muchos menos antibióticos dañinos y las frutas y verduras tienen menos pesticidas. Sigue comiendo lo que es mejor para ti.

No te preocupes: te sorprende tu instructor de yoga comiendo yogurt griego antes de una clase y te echa un sermón sobre cómo los lácteos interferirán con tu práctica. Respira profundo y recuerda que es tu instructor de yoga, no de yogurt.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.