Una diagnosis oportuna es difícil de conseguir ya que no existen pruebas para confirmar la presencia de SFC y varias otras condiciones pueden imitar estos síntomas.
Si crees que eres de las personas que caen en esta categoría, lee lo siguiente y si respondes que sí a uno o más de estas preguntas, entonces valdría la pena ir con el doctor para que te evalúe.
¿Estás cansado incluso después de una noche completa de sueño?
Es uno de los componentes más frustrantes del SFC, que ni con mucho sueño dejas de sentirte cansado. Duermes ocho horas, hasta diez, regularmente y todas las mañanas te es imposible levantarte. Lo que causa este cansancio aún es un misterio, aunque muchos creen que surge después de una infección viral. Algunos expertos creen que el SFC es causado por una combinación de factores, incluyendo un sistema inmunológico sobre reactivo y anomalías hormonales.
¿Cualquier cantidad de ejercicio te deja exhausto?
No toma más que un poquito de actividad física o estrés para que alguien con SFC se sienta completamente cansado. Estas personas pueden tardar días en recuperarse de alguna actividad como llegar a casa del trabajo.
¿Te duele el cuerpo?
Personas con SFC no sólo tienen que lidiar con cansancio. Dolores de cabeza, musculares y en las articulaciones, nódulos linfáticos y dolor de garganta también pueden ser síntomas de esta condición. Los doctores no saben exactamente qué causa los dolores, pero muchos estudios indican que podría ser debido a inflamación crónica del cuerpo.
¿Tienes problemas cognitivos?
Más de 90% de los pacientes con SFC tienen problemas cognitivos como lentitud para pensar, trabajo para comprender lo que leen, mala memoria y siempre sentir la mente nublada. La depresión también es común.
Si se te olvidan las llaves de vez en cuando, no te preocupes, pero si te está costando trabajo crear oraciones o sufres de depresión, ve con el doctor.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.