A nadie le gustan los dolorosos fuegos que salen en los labios, sin embargo, entre 50% a 80% de adultos tienen herpes oral. Y si, el virus de herpes simplex (HSV-1) es la causa principal para los fuegos.

El HSV-1 es transmitido principalmente por contacto oral, principalmente con llagas, saliva o superficies alrededor de la boca. Puede ser transmitido aún cuando no hay síntomas presentes, aunque el mayor riesgo es cuando hay llagas presentes.

La ONU hace nota de que el HSV-1 no presenta síntomas para la mayoría de la gente, por lo cual podrían padecerlo sin saberlo. Sin embargo, este virus también es uno que no se va una vez lo contraigas, haciendo que los fuegos sean un problema recurrente para aquellos que sí presentan síntomas.

Si tú eres de las personas que sí presenta estos síntomas, aquí hay algunas causas que hacen que aparezcan llagas en tu boca que posiblemente no conocías ya:

Falta de sueño

La fatiga definitivamente puede dejarte abierto para que te salgan fuegos. El sueño es muy importante para varias funciones del cuerpo, pero especialmente para el sistema inmune. Sin el sueño adecuado, tus defensas no serán suficientemente fuertes para mantener las llagas bajo control. Para reducir tu vulnerabilidad, dormir bien es clave.

Estrés

El estrés cae en la misma categoría que la fatiga. No sólo agota tu bienestar emocional, pero puede costarle a tu sistema inmunológico también. Ya que los fuegos sólo te causarán más estrés, intenta hacer algo para reducir tu estrés a lo largo del día.

Enfermedad

Infecciones concurrentes pueden darle vida a una infección de HSV-1 latente. Si alguien tiene una infección del ducto respiratorio superior, esto puede ser suficiente para causar la aparición de fuegos. Pero no sólo es con infecciones preexistentes. Cualquier cirugía o procedimiento médico que le da más trabajo a tu sistema inmunológico, lo cual puede resultar en fuegos.

Tu regla

Ya te habrás dado cuenta que cualquier cosa que afecte a tus defensas puede causar un fuego. Y nada altera tus niveles hormonales como la menstruación. Hay muchos cambios hormonales en este momento que pueden tener efectos sobre tu sistema inmunológico. Si notas este patrón, entonces habla con tu doctor al respecto, seguramente te puede dar algún medicamento para no tener que sufrir de fuegos durante tu regla.

El sol

Si eres susceptible a los fuegos, considerarlo como otra razón de cuidar tu piel y protegerte del sol. Aunque el sol sea fantástico para subir tus niveles de vitamina D, cuando te da en la cara también te vuelve más susceptible a que te salgan llagas por el HSV-1. No importa qué temporada sea, siempre usa protector labial y humectantes faciales con suficiente FPS.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.