Cuando un mosquito te pica, deposita pequeñas cantidades de su saliva dentro de tu piel. La proteínas en la saliva causan una ligera reacción alérgica en tu sistema inmunológico, lo cual resulta en inflamación y comezón. Quizá sientas la tentación de rascarte, pero eso sólo lo empeorará. Esto sucede porque al rascarte, tu cuerpo libera componentes de tu sistema inmunológico que empeora el hinchamiento y la comezón.

Así que en vez de rascarte la próxima vez, intenta esto para tener un alivio instantáneo:

1. Loción de calamina

Esta crema de color rosa chicle, hecha de óxido de zinc, es tu mejor amigo contra la comezón. Cuando entra en contacto con tu piel, crea una sensación fría que alivia temporalmente la comezón. Aunque no sirve para reducir el hinchamiento, así que no sanará el piquete.

Puedes usarlo por su cuenta si es suficiente o puedes combinarlo con otro tratamiento como hidrocortisona o antihistamínicos.

2. Crema de hidrocortisona

Si la calamina no sirve, prueba una crema de hidrocortisona. Contiene corticosteroides que reducen la inflamación y la comezón y ayudará a que sane más rápido.

3. Un antihistamínico oral

Los antihistamínicos orales pueden darte alivio al reducir la respuesta del cuerpo ante las histaminas, los componentes que causan la comezón. Pueden ayudarte a dormir mejor, pero si quieres tomarlo de día, procura que no cause sueño.

4. Hielo

El frío es un vasoconstrictor, así que reduce la cantidad de sangre que fluye a la picadura para reducir el hinchamiento y la comezón. Al igual que el calomino, lo puedes usar para tener más alivio entre otros tratamientos como la hidrocortisona.

Sólo llena una bolsa con hielos y envuelvela con una toalla y ponla sobre el área afectado.

5. Una bolsa fría de té

Como el hielo, una bolsa de té mojada con agua fría reducirá el flujo de sangre en la superficie de tu piel para calmar el hinchamiento y la comezón. Pero el té también contiene unas propiedades vasoconstrictoras adicionales, como las taninas, así que da más alivio que el hielo.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.