No importa qué tan bien te sientas en la noche, después de una noche de muchos tragos siempre te vas a sentir mal por la mañana.

Aunque no exista un remedio real para la cruda, existen varias maneras para prevenir los síntomas. Todo desde qué tipo de licor bebes hasta a qué hora bebiste contribuye con tu nivel de miseria al día siguiente. Aquí hay unos errores que cometes que estarán empeorando tu cruda:

Tomas shots

Una de las maneras más fidedignas de predecir el nivel de tu cruda es la velocidad con la que bebes. El alcohol es el alcohol, pero si bebes una cerveza en 40 minutos y un shot de whiskey en 4 segundos, es whiskey llegará a tu organismo mucho más rápido.

Tu cuerpo sólo puede procesar una copa por hora, aproximadamente. Si bebes más que eso, corres el riesgo de deshidratarte, lo cual resultará en mayor miseria por la mañana.

Ayúdate bebiendo un vaso de agua junto con cada bebida que te tomas. También toma en cuenta que la definición de una bebida puede variar dependiendo de que si estás tomando shots o vino.

Tomas el licor equivocado

Han habido estudios que vinculan con congéneres (prácticamente cualquier cosa aparte del agua y el alcohol en bebidas alcohólicas) con la cruda mortal (no literalmente). Aunque esto sólo sea cierto hasta cierto grado, los estudios han atribuido la cruda a bebidas más oscuras, como el vino tinto, borbón, whiskey, etc. que suelen tener mayor nivel de congéneres.

Es posible que los congéneres tengan un papel en causar la inflamación en tu cuerpo, lo cual te causa malestar. Y cómo estos permanecen más tiempo en tu organismo que el alcohol, podrían prolongar los síntomas de la cruda.

Combinas tus bebidas

Si bebes un tipo de licor toda la noche, minimizarás las posibilidades de sentir que te mueres al día siguiente. Cuando combinas diferentes tipos de impureza en tu cuerpo, terminarás por lo general con una peor resaca.

Si empiezas la noche con una cerveza con ciertos sabores y congéneres seguido por un shot de whiskey, que contiene methanol, tu cuerpo podría tener reacciones distintas a cada cosa, resultando en peores síntomas y más variados, dependiendo de qué tomaste y cómo tu cuerpo reacciona a todo.

No bebiste más que puro alcohol

Como el alcohol es un diurético, es importante mantenerse hidratado. Cuando estás sobrio, la hormona antidiurético trabaja para prevenir la producción de orina, haciendo que tus riñones conserven agua.

Pero cuando bebes alcohol, este reprime esta hormona, haciendo que vayas más seguido al baño, básicamente deshidratándote.

Consumir muchos electrólitos mientras bebes te mantendrá hidratado y minimizará la severidad de tu cruda al día siguiente.

No comiste en toda la noche

Es simple, cuando tienes el estómago lleno absorbes menos el alcohol. También hace más lenta la digestión del alcohol. Por lo tanto, si te echas una copa de vino con la cena, disminuyen drásticamente las posibilidades de amanecer con dolor de cabeza.

Literalmente bebiste toda la noche

Beber hasta tarde reprime la producción de melatonina, por lo tanto te costará trabajo dormir y permanecer dormido. Lo ideal es que bebas con suficiente tiempo para que tu cuerpo pueda digerir el alcohol y todos sus subproductos antes de dormir. Si bebiste una copa, por ejemplo, procura tener al menos una hora antes de irte a dormir.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.