Markus Hofstätter recientemente restauró una ave de bronce que utilizaban los fotógrafos en tiempos pasados para conseguir que los niños y los padres se fijaran en un mismo punto al mismo tiempo para un retrato.
Relájate un rato en lo que admiras cómo cobra vida nueva esta pequeña antigüedad.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.