Hacer ejercicio cuando estás enferma no es algo muy intuitivo que digamos. ¿Pero qué si tus síntomas no son tan graves? ¿Cuándo deberías de estarte quieta y cuándo puedes darte el lujo de regalarte un poco de actividad física?
Pues depende, no todas las enfermedades son iguales.
En algunos casos de gripa, un poco de ejercicio podría ser benéfico para ti. Pero ten bien en cuenta que hay un delicado balance entre tu capacidad de estar activa y la capacidad de tu sistema inmune de luchar contra infecciones.
Así que si te encanta mover el cuerpo pero estás lidiando con un poco de moco chorreando por tu nariz o un ligero dolor de cabeza, adelante.
Pero antes de que empieces en la caminadora o lo que sea, sigue leyendo para estar segura si es buena idea para ti o no.
¿Cuándo puedes hacer ejercicio estando enferma?
Si tienes gripa y quieres ejercitarte, sigue esta regla:
Si todos tus síntomas se encuentran arriba del cuello, puedes hacer ejercicio sin problema. Pero si los síntomas se encuentran debajo del cuello (el pecho, por ejemplo), entonces quizá no sea buena idea.
Siguiendo esta regla puedes hacer ejercicio con este tipo de síntomas:
- Nariz chorreante
- Congestión nasal
- Dolor de garganta
El mejor tipo de ejercicio con gripa:
- Una trotada ligera
- Ejercicio en bicicleta
- Elípticos
- Entrenamiento de resistencia ligero
Los peores ejercicios cuando tienes gripa:
- Corridas largas y rigurosas
- Entrenamiento de intervalos de alta intensidad
- Entrenamiento de resistencia fuerte
Hagas lo que hagas, si vas a un gym, procura siempre limpiar las máquinas que uses para evitar contagiar a los demás.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.