Pensarás que tú controlas tu horario, pero tu cuerpo evolucionó para seguir un ritmo natural. Acatarte a esta rutina podría ayudarte a estar en perfecta forma y salud.

Tomar café

Es mejor tomar café temprano por la mañana. Si te lo tomas más tarde puedes reiniciar tu reloj biológico, haciendo que te cueste trabajo dormir. Si crees que puedes tomarte un shot de espresso a las 8 pm y dormir a las 10, intenta dejar la cafeína a esta hora por un par de semanas y fíjate en el cambio para darte cuenta de la diferencia de dormir bien.

Comer

Es mejor que tu almuerzo más grande sea temprano. La insulina se encuentra en tu punto más alto en tu cuerpo al medio día y gradualmente cae. Así que tu azúcar sanguínea es menos probable de elevarse repentinamente después de un buen desayuno que con una cena pesada.

Dormir

Alrededor de las 8-9, nuestros cuerpos empiezan a reducir su ritmo y dormimos mejor cuando nuestra temperatura corporal está baja. Según estudios, es mejor dormir entre seis horas y media a ocho.

Ejercicio

Algunas personas juran que sus corridas en la mañana son lo mejor del mundo para su cuerpo, pero se ha demostrado que el tono muscular se encuentra en su punto máximo alrededor de las 5 pm.

Ser creativo

La evolución de los idiomas, la religión y la filosofía empezaron con pláticas por las noches. Muchos estudios indican que nuestra mente es más activa en las noches, así que si tienes planeado escribir algo, es mejor esperar a la noche.

Hacer matemática

Según estudios, nuestro mayor punto de alerta es entre las 10 am y las 2 pm, con un punto máximo a las 12. Durante las primeras horas que despertamos, nuestro órganos con funciones más básicas toman prioridad. Una vez despiertos y activos, nuestro cerebro tiene más oportunidad de recibir energía de tu organismo.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.