Hablar más de un idioma te ayuda a romper barreras y viajar de manera más fácil, también te ayuda a comunicarte con otras personas y por extensión relacionarte con otras formas de vida y otras culturas. Sin embargo, ser bilingüe no sólo tiene ventajas a nivel comunicativo o social, sino también a nivel cerebral.

En estudios anteriores ya se ha comprobado que hablar dos o más idiomas nos protege contra la demencia, y hoy se volvió a confirmar el dato con un nuevo estudio publicado en Annals of Neurology llevado a cabo por Thomas Bak y sus colegas, de la Universidad de Edimburgo, que asegura que aprender otro idioma, sin importar que sea durante la infancia o la edad adulta,  tendría bondades para retardar el deterioro de nuestro cerebro durante el envejecimiento.

Eso si, sigue existiendo un problema: No esta claro qué es lo que ayuda a reducir el deterioro cerebral, si el aprendizaje de una segunda lengua, o que las personas con un elevado rendimiento cognitivo (más inteligentes) son las más propensas a aprender idiomas. Es decir, no se sabe si el aprendizaje de nuevas lenguas es una causa o una consecuencia de mantener un cerebro sano en la vejez.

 ”La pregunta crucial es si las personas mejoran sus funciones cognitivas a través de aprender nuevos idiomas o si aquellos con mejores funciones cognitivas de base son más propensos a ser bilingües”

El líder del estudio dijo que siempre existe la duda de “qué aparece primero”, el bilingüismo o el estado de salud cerebral. Indicó que las personas que hablan otro idioma no lo hacen por interés o porque son brillantes, sino por necesidad.

Para llevar a cabo el estudio se analizó a 835 personas de Lothian, en Escocia (Reino Unido). De todos ellos, 262 hablaban dos o más idiomas, y 195 de estos multilingües habían aprendido el segundo idioma antes de los 18 años, mientras que los otros 67 aprendieron un segundo idioma tras los 18 años de edad.

“No hay magia en aprender idioma”, dijo Bak. “La actividad mental y física durante la vida es protectora y aprender un idioma es una muy buena forma de entrenar el cerebro“.