Esta semana, la Peninsula Coreana ha estado festejando el festival de Chuseok, donde las familias se unen para compartir comida y darle gracias a sus ancestros por una cosecha abundante.
En el norte, el festejo también es un tiempo donde funcionarios intercambian regalos de lujo y esperan regalos a cambio de su preferencia. Adicionalmente, aparte de regalos de dinero, regalos populares incluyen carne de res (a pesar de que es ilegal matar vacas en el país) y metanfetaminas.
La gente aprovecha estos festejos de intercambio de regalos para sobornar a funcionarios. Hace poco tiempo, dinero y un regalo de pescado y cigarros (para hombres) habría sido un soborno adecuado. Recientemente, las metanfetaminas también han sido ideales.
Sin embargo, el soborno más opulento que alguien podría dar en estas fiestas actualmente, es un regalo de carne de res y dinero.
En Corea del Norte, la cultura de intercambio de regalos esta creciendo. Cuando Chuseok se acerca, los funcionarios y la clase media, conocida como donju, empiezan a trabajar para tener la preferencia con los sobornos.
La cultura de soborno en Corea del Norte esta fuera de control. Las buenas relaciones con los funcionarios deben mantenerse si los ciudadanos quieren permanecer sin problemas al tomar parte en actividades del mercado. Aunque dar y recibir sobornos ya es considerado algo cotidiano, el tipo de soborno varía mucho e incrementan los precios. Antes era el rango de una persona que determinaba su nivel de influencia, ahora es su riqueza.
Durante estos festejos, hay funcionarios que no se puede faltar darles sus regalos (sobornos). Estos son los que tienen puestos importantes como organizar los mercados y asignar sus puestos a los comerciantes.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.