Si tienes el hábito de morderte las uñas, es muy probable que toda tu vida has intentado dejar de hacerlo. Pero según un estudio reciente, esto puede en realidad ser un hábito saludable, aunque te deje las uñas horribles al final.

Según la investigación, niños que se muerden las uñas o chupan los dedos son menos propensos a desarrollar alergias más adelante en la vida.

Para el estudio, científicos siguieron a más de mil personas nacidas a principios de los 70 hasta ser adultos, luego les hicieron pruebas para encontrar alergias. Aquellos que se mordían las uñas o chupaban los dedos tenían menos probabilidad de ser alérgicos a cosas como polvo, pasto, perros, gatos u hongos en el aire. Si hacían ambas cosas, las probabilidades disminuyen aún más.

Los científicos averiguaron esto al llevar a cabo una prueba de alergias picando la piel en los participantes cuando tenían 13 y 32 años. También tomaron nota si el sujeto se mordía las uñas o chupaba los dedos de pequeño.

A los 13, 45% de los participantes presentaban alguna clase de reacción alérgica de la prueba, mientras que 40% de aquellos tenían una fijación presentaron alguna clase de reacción. Pero sólo 30% de aquellos que se mordían las uñas y se chupaban el dedo presentaron alguna clase de alergia. Esto se mantuvo consistente a lo largo de la adultez y no hubo ninguna diferencia si tenían mascotas o si fueron expuestos regularmente al polvo.

Los investigadores creen que tiene que ver con una exposición temprana a la tierra y a los gérmenes. Básicamente, si te chupabas los dedos o mordías las uñas, terminabas ingiriendo estos gérmenes desde temprana edad, tu cuerpo empieza a crear una inmunidad hacia ellos y reduce la probabilidad de que tengas alguna reacción alérgica cuando seas expuesto a estos elementos más adelante en la vida.

No fomentan estos hábitos los científicos en niños, pero es bueno saber que al menos existe una ventaja por morderse las uñas de pequeño.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.