Como mucha gente que pasa rato de pasajero en el coche, seguro sentirás alguna tentación de echar el asiento hacia atrás y subir los pies para estar más cómodo. Sin embargo, una mujer recientemente se rompió la nariz, el tobillo, el brazo y el fémur por adoptar esta posición en el coche. Sólo un ejemplo de por qué deberían de permanecer tus pies en el suelo mientras estás en el coche.

Audra Tatum fue parte de un accidente que le cambió la vida después de una leve colisión donde todos los demás involucrados salieron relativamente ilesos.

La bolsa de aire se activó, lanzando su pie hacia arriba y rompiendo su nariz. “Estaba mirando la suela de mi pie dirigido hacia mi cara,” dice Tatum.

Cuenta que subir los pies al tablero ha sido un hábito que ha tenido toda la vida, a pesar de todas las veces que su esposo le dijo que se iba a lastimar gravemente algún día. Pero no aprendió hasta que fue demasiado tarde.

Tras varias cirugías y semanas de rehabilitación física, aún le tomó más de un mes a Tatum poder caminar nuevamente. Más de dos semanas tras el accidente, su vida aún no ha vuelto a la normalidad. Ya no puede cumplir con su trabajo como enfermera de emergencias porque no puede levantar a los pacientes y no puede estar de pie más de cuatro horas al día sin sufrir un dolor agonizante.

A pesar del dolor, Tatum quiere crear consciencia de los peligros de este hábito que presentan muchas personas. Las bolsas de aire se expanden entre 150-350km/h.

Si subes los pies al tablero y no se activa la bolsa de aire, el daño incluso puede ser peor.

 

Así que simplemente trata de evitar hacer esto. Sabemos que es cómodo, pero además de ser peligroso, algunos podrían considerarlo una falta de respeto si el coche no es tuyo, ya sea porque lo ensucias también o simplemente a la gente no le gusta que los demás pongan sus pies sobre su tablero. Además, con tus pies arriba, obstruyes la vista al espejo lateral.

Simplemente no hay otro beneficio fuera de la comodidad con este hábito, así que procura tener los pies en el piso mientras estás dentro de un auto.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.