
Cómo activar tu nervio vago con un simple sonido
La próxima vez que te sientas abrumada, no busques fuera: tu propia voz puede ser una herramienta poderosa para calmar tu cuerpo y sistema nervioso. Activar conscientemente el nervio vago —una especie de puente entre tu mente y tus órganos internos— puede ayudarte a reducir el estrés, y una de las formas más accesibles de hacerlo es a través del sonido.
El nervio vago y tu bienestar
El nervio vago participa en procesos que van desde la digestión hasta la regulación de la frecuencia cardíaca. Cuando lo estimulamos de forma intencional, enviamos señales de seguridad al cerebro que ayudan a que el cuerpo entre en un estado de relajación. ¿Una forma sencilla de hacerlo? Vocalizar.
Cantar, tararear o simplemente hacer vibrar tu garganta
Sonidos sostenidos como el “om” del yoga o un tarareo suave tienen la capacidad de activar las fibras del nervio vago que pasan cerca de las cuerdas vocales. Esto no es sólo espiritualidad de Pinterest: estudios científicos como este publicado en Frontiers in Psychiatry respaldan los beneficios de este tipo de prácticas para modular el sistema nervioso autónomo.
Puedes hacerlo en cualquier momento: mientras te bañas, en el coche, al preparar el desayuno. No se trata de cantar bien, sino de generar una vibración constante. Además de ayudar con el estrés, este hábito puede mejorar tu digestión, sueño y enfoque mental.
Hazlo parte de tu rutina
Intenta vocalizar unos minutos al día, especialmente en momentos de transición como antes de dormir o al iniciar tu jornada. Combinar este hábito con respiraciones profundas puede potenciar aún más sus efectos.
Si te interesa conocer más sobre cómo pequeñas acciones influyen en tu bienestar, puedes leer esta nota de Caracteres sobre cómo el nervio vago impacta tu salud mental y física.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.