Cuando ambos en la relación durmieron menos de lo debido la noche anterior, solían tener un comportamiento más negativo durante la discusión. Eran más hostiles, críticos, mostraban mayor desprecio, eran más retraídos o mostraban señales no verbales, como miradas feas o volteando los ojos.
Por cada hora menos de sueño de los participantes, sus niveles de indicadores conocidos de inflamación se elevaron por un 6% después del conflicto. Esto es importante saber ya que la falta de sueño no afectó estos indicadores de inflamación en la mañana. Sólo se volvieron importantes una vez el conflicto comenzó.
Esto indica que la falta del sueño afecta la respuesta de tu cuerpo ante el estrés, haciendo que tus niveles de inflamación aumenten debido a una situación muy emocional.
Esto puede ser un riesgo de salud ya que mayores niveles de estos factores inflamatorios han sido vinculados a mayores riesgos de contraer enfermedades de corazón, diabetes y artritis entre otras condiciones.
La buena noticia es que parece haber un efecto protector en estos casos si uno de los dos durmieron bien y suficiente. Esto suele ser suficiente para neutralizar el desacuerdo desatado por la persona de la pareja que durmió mal.
Aquí hay otra razón por la cual deberías intentar dormir como mínimo unas 7 horas cada noche. Pero si te encuentras particularmente de malas con tu pareja después de una noche de mal sueño, procura mantener todo tan civilizado como sea posible.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.