Las fiestas de alberca son divertidas y una buena forma de refrescarte cuando empieza a hacer calor fuera, excepto cuando la alberca está llena de heces.

Miles de personas se han enfermado por agua contaminada con bacterias o parasitos de la diarrea de otros. Es común que la gente se enferme por agua recreativa tratada. La mayoría de estas enfermedades se propagan en hoteles, en sus albercas, spas y jacuzzis y ni hablemos de los parques acuáticos.

El criptosporidio es un parasito que causa diarrea que se propaga al ingerir agua contaminada con heces y es responsable por 58% de estos casos de enfermedad por alberca. Esto sólo nos indica que gente con diarrea usa estas alberca y no se mantienen limpias adecuadamente, lo cual requiere más que simplemente echarle cloro al agua.

El cripstosporidio puede vivir por varios días en albercas con los niveles recomendados de cloro, lo cual significa que se necesitaría muchísimo cloro para matar a este parásito.

Pero también pueden haber dos tipos de bacteria en las aguas de albercas públicas: legionella y pseudomona, aunque estos dos son responsables por muchos menos casos de contagio por agua de alberca.

¿Así que queda arruinado tu verano si no puedes ir a la playa?

No, pero deberías de tomar precauciones.

La gente que corre riesgo de desarrollar la enfermedad de legionarios–fumadores y aquellos con sistemas inmunes débiles–deberías de evitar jacuzzis y spas ya que son los puntos más comunes para infección.

También haz lo posible por no tragar agua de alberca. Pero lo más importante es evitar nadar en alberca si tienes diarrea para evitar contagiar a otros.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.