Orinar es una función corporal que solemos dar por sentado. Vas al baño, te sientas (o no), orinas, te limpias y te vas.

Nunca le piensas más hasta que te pasa el día que nada quiere salir. Piensa en esos momentos donde tienes que dejar una muestra de orina para el doctor. No sueles llegar con la vejiga llena. ¿Qué haces en estos momentos?

¿Pero por qué no podrías orinar para empezar?

Para empezar, no deberías de estresarte si tienes un pequeño caso de vejiga tímida cuando tienes que dejarle una muestra al doctor, puede ser difícil orinar en cualquier momento dado, especialmente si no tienes la vejiga llena.

Pero si regularmente te aguantas las ganas de ir al baño, puedes entrenar a tu vejiga a funcionar de manera que no debe, causando problemas.

Pasa seguido en gente que se aguanta las ganas de orinar por estar en una situación social y cuando por fin van, su vejiga no suelta nada. Terminan entrenando a la vejiga que se aguante teniendo mucho.

Esto pasa con el tiempo, claro. No por una vez que te aguantes durante una junta larga te va a pasar más seguido.

El estreñimiento también puede ser un factor influyente. Cuando tu recto está lleno de heces, puede funcionar como una barrera que no permita que la vejiga se vacíe como debería.

También existe una condición conocida como paruresis (la vejiga tímida) que es que te cueste trabajo orinar cuando estás cerca de otras personas. Esto en realidad es una fobia social.

En realidad hay maneras que te puedan ayudar a orinar

Mantenerte bien hidratado es claramente lo más importante aquí. Esto significa consumir alrededor de 2.7 litros de fluidos por día, incluyendo lo que encuentres dentro de tus alimentos y bebidas que no son agua.

Si estás bien hidratado y sólo tienes problemas de desempeño, intenta prender la llave de agua o jálale a la palanca del escusado para tapar los sonidos.

También hay una técnica en donde empiezas respirando normalmente, luego exhalas como 75% de tu aire y aguantas la respiración por unos 45 segundos. Deberías sentir tu fondo pélvico relajarse y la orina saldrá. Si eso no funciona, cualquier técnica de relajación podría funcionar.

Si con todo eso aún tienes problemas orinando, ve con un doctor. Esto es particularmente cierto si sueles pasar ocho horas sin orinar aunque hayas estado bebiendo normalmente o si sientes que tienes que ir al baño y no puedes.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.