Seguro has visto a personas en el gym que van y cargan el máximo peso que pueden en una barra de pesas. Esta es una forma de medir tu fuerza, pero si no eres levantadora de pesas competitiva, realmente sólo es para presumir.
Si tú eres de estas personas que carga todo el peso que puedes para una repetición, es hora de que lo dejes de hacer. Sólo limitarás tus progreso con tu rutina y te abres a lesiones.
Si entrenas para hacer tus músculos más fuertes, este tipo de entrenamiento es una pérdida de tiempo. Hay mejores maneras para poner tu fuerza a prueba y desarrollar tus músculos.
Si quieres poner a prueba tus límites, hay maneras inteligentes de hacerlo y a la larga podrás cargar más peso que si hicieras un levantamiento todo el peso que aguantas.
3 mejores alternativas a cargar tu máximo peso
Maximiza las repeticiones, no el peso
Es más inteligente trabajar con un peso que puedas levantar quizá unas tres a cuatro veces y aumentar de ahí, enfocándote en mantener una alineación segura.
De está manera pasarás menos tiempo bajo tensión, lo cual llevará a más crecimiento muscular y aumento de fuerza. Además es una manera mucho más segura de poner a prueba tus límites.
Levanta debajo de tu máximo
No tienes que dejar de levantar mucho, sólo no cargues tanto que sacrificas el tiempo óptimo bajo tensión muscular.
De está manera, si haces más repeticiones (unas 3 a 5) todavía puedes cargar mucho peso, pero sin el desgaste muscular asociado con cargar tu mayor peso con cada repetición.
Consigues todos los beneficios de la hipertrofia con la carga, tiempo bajo tensión y la conexión mental con tus músculos, pero de manera más segura para tu cuerpo.
Sólo llega a tu máximo de vez en cuando
Con todo esto dicho, quizá aún quieras cargar el mayor peso que aguantas. Si insistes en hacer esto, asegúrate de sólo hacerlo cuando sea necesario para medir tu progreso.
Reduce la cantidad de veces que lo hagas a unos 3-4 por año, al final de tu ciclo de entrenamiento. Así le darás a tus músculos y tejidos conectivos tiempo suficiente de recuperarse de tanta tensión.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.