Investigadores encuestaron alrededor de 500 personas que padecían de diabetes en Chicago y en Tailandia, usaron dos zonas geográficas muy distintas porque los ciclos de sueño varían según la locación. En ambos grupos, aquellos que preferían mantenerse despiertos por las noches decían experimentar más síntomas de depresión que aquellos que dormían más temprano, sin importar edad, sexo o calidad de sueño.
Esta relación no necesariamente comprueba una causa y efecto, pero estas tres condiciones ya están entrelazadas: dormir poco eleva la probabilidad de contraer diabetes y las perturbaciones del sueño también son unas de las señales más comunes de la depresión.
Estos descubrimientos son importantes porque la depresión es común en pacientes con diabetes tipo 2, también, estudios previos muestran que la depresión sin tratar está relacionado a peores resultados en los pacientes, incluyendo el auto-cuidado de pacientes con diabetes, control de la glucosa en la sangre y complicaciones del diabetes.
Se requiere de más investigación para entender mejor cómo el sueño, la depresión y la diabetes interactúan entre sí para que se puedan implementar tratamientos adecuados para mejorar las tres condiciones.
Ya sea que tengas diabetes del tipo 2 o no, la depresión tampoco es algo que debería de tomarse a la ligera. Además, tu falta de sueño podría ser la primera pista de que algo más serio que sentirte triste esté en juego.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.