El ejercicio de fortalecimiento parece algo muy sencillo: usas una buena técnica, haces las repeticiones asignadas y cuando se te empieza a hacer muy fácil, le metes más peso.

Pero las cosas no siempre son tan simples y a veces tienes que dejar de estar sumando más peso al ejercicio. Quizá no tengas pesas grandes disponibles o un ejercicio simplemente no debe llevar tanto peso.

Aquí te platicamos tantito de las claves para entender que no todos los levantamientos de pesas son iguales.

Deja de sumarle mucho peso a ejercicios de asistencia

Cuando se trata de ejercicios grandes como levantamientos de peso muerto o sentadillas, hacer menos repeticiones y sumándole cada vez más peso tiene su lugar. Puedes sumar más peso con estos ejercicios porque retan a todo tu cuerpo.

Pero cuando se trata de “levantamientos de accesorio”, estos ejercicios no aprovechan el poder de todo tu cuerpo. A veces aíslan músculos y en otras ocasiones desafían tu estabilidad mientras entrenas otros músculos.

Estos ejercicios no están hechos para que te pongas a prueba con más y más peso.

La fuerza no siempre es la meta con cada ejercicio

Aunque quieras poner énfasis en la importancia de sumar más peso, para tus otros ejercicios deberías de poner más énfasis en el patrón, los beneficios del movimiento y en cómo te pueden ayudar con los ejercicios más fuertes.

La mayoría de los ejercicios accesorio están diseñados para enfocarse en músculos particulares y en tus debilidades de manera que no lograrás con los ejercicios más pesados.

Respeta tu cuerpo y la calidad de estos movimientos para que ayuden. Una sentadilla dividida, por ejemplo, eventualmente te ayudará con sus sentadillas normales.

No debería de ser tu meta poner el máximo de peso en tus máquinas de ejercicio cuando estás ejercitando sólo los brazos o las piernas, ahorra ese esfuerzo para ejercicios que se enfoquen en la fuerza de todo tu cuerpo.

Publicado por Othón Vélez O’Brien.