Empezaste a consumir más proteína, según tú haciéndole bien a tu cuerpo dándole el apoyo que necesita para varias funciones del cuerpo, incluyen crear y mantener el músculo. Pero de la nada tu cuerpo reacciona de manera que no esperabas y estás echándote gases a cada rato, prácticamente fumigando el cuarto donde estés.
Los gases de proteína son un tema real, son algo que se discute mucho en el ámbito del fitness. Seguro es algo que te ha hecho reconsiderar tu consumo de proteína, pero la realidad es que no tienes que dejar esos licuados para dejar de tener estas flatulencias.
En realidad se puede solucionar con unos pequeños ajustes a tu dieta.
It’s enough to make you rethink your nutritional strategy — but the truth is, you don’t have to cut down on your protein shakes to curb your flatulence. You likely just have to make a few small tweaks to your diet. We asked a few experts to explain.
¿Qué causa los gases de proteína?
Es un mito común el que las cantidades de proteína que estás consumiendo te están causando más flatulencias. No existe evidencia científica de esto. Es una cuestión más del tipo de proteína que estás consumiendo.
La mayoría de las proteínas en polvo que venden son de origen animal y contienen azufre, lo cual contribuye al mal olor en tus gases. Y muchas veces ni siquiera es la proteína en tus licuados que te está causando estos gases, muchas veces son los azúcares o endulzantes que les agregan para contrarrestar el sabor.
Si consumes polvos de proteínas de origen vegetal, esto te puede causar algunos problemas digestivos debido a los carbohidratos de cadena corta, conocidos como oligosacáridos, que se fermentan con las bacterias en tu intestino.
Cómo deshacerte de los gases de proteína
Cambia la proteína que estás consumiendo
Muchos licuados de proteína tienen lácteos, lo cual puede ser malo si tienes alguna intolerancia hacia estos.
Otros productos de proteína contienen proteína de suero. No todas las proteínas son iguales, algunas están hechas de concentrados y contienen más lactosa. Recomendamos aislado de suero de proteína porque tiene menos lactosa.
También puedes optar por proteínas en polvo sin proteínas de lactosa, como los que están hechos de proteína de chícharo o de soya.
También busca productos que no contengan alcoholes de azúcar como el sorbitol o manitol.
Agrega unas hierbas a tu dieta
La menta y el jengibre son muy buenos para aliviar tu intestino. Tómalos antes o con tu licuado de proteína para dejar que tu colon se relaje.
Publicado por Othón Vélez O’Brien.